El peligroso virus infantil que puede poner en riesgo a tus hijos. Infórmate y aprende a combatirlo

Este es el peligroso virus infantil que puede poner en riesgo a tus hijos. Infórmate y aprende a combatirlo

La enfermedad de manos, pies y boca (EHPB) es una infección viral contagiosa que afecta principalmente a niños pequeños, aunque en ocasiones puede presentarse también en adultos. En El Salvador, donde las reuniones familiares y escolares son parte esencial de la vida cotidiana, la propagación de este virus puede convertirse en un serio problema de salud pública. Por ello, es fundamental que los padres y cuidadores conozcan cómo prevenir su contagio y proteger a los más vulnerables.

¿Qué es la enfermedad de manos, pies y boca?: La EHPB es causada por enterovirus, siendo el coxsackievirus A16 el más común, aunque también puede involucrar a otros tipos. La enfermedad se caracteriza por la aparición de una erupción en las manos, pies y en ocasiones en la boca, acompañada de fiebre, dolor de garganta y malestar general. Aunque la mayoría de los casos son leves y se resuelven en una semana, en algunos niños puede haber complicaciones y, en raras ocasiones, complicaciones neurológicas.

¿Cómo se transmite el virus?: La forma de contagio es principalmente a través del contacto directo con las secreciones nasales y bucales, heces o fluidos de las ampollas de una persona infectada. Además, el virus puede propagarse a través de superficies contaminadas y utensilios que han estado en contacto con dichas secreciones. En ambientes como guarderías, escuelas y hogares donde conviven muchos niños, la transmisión puede ser acelerada si no se aplican medidas de higiene adecuadas.

Medidas de prevención fundamentales: Ante la amenaza de este virus, es crucial que los padres salvadoreños pongan en práctica una serie de medidas preventivas para evitar que el virus se propague entre sus hijos:

1. Lavado de manos frecuente y correcto La higiene de manos es la primera línea de defensa contra la EHPB. Enseña a los niños a lavarse las manos con agua y jabón durante, al menos, 20 segundos, especialmente después de ir al baño, antes de comer y luego de jugar al aire libre. Los padres pueden convertir este acto en un juego o rutina divertida para motivar a los niños a hacerlo con regularidad.
2. Desinfección de superficies y juguetes Es indispensable limpiar y desinfectar con regularidad las superficies y juguetes que usan los niños. Esto ayuda a eliminar posibles restos del virus y reduce el riesgo de contagio. Utiliza productos desinfectantes seguros y efectivos, siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Salud.
3. Evitar compartir utensilios, vasos y otros objetos personales Enseña a los pequeños la importancia de no compartir objetos personales, pues estos pueden ser un vehículo de contagio. Incentiva el uso de utensilios individuales en el comedor y durante las actividades escolares.
4. Aislamiento de niños enfermos Si un niño presenta síntomas de la enfermedad de manos, pies y boca, es fundamental mantenerlo en casa hasta que se haga negativo o se recupere completamente. Esto no solo ayudará a la rápida recuperación del niño, sino que también evitará la propagación del virus a otros compañeros y familiares.
5. Educación y comunicación con el entorno escolar Los padres deben mantener una comunicación fluida con las escuelas y centros de cuidado infantil, asegurándose de que se promuevan medidas de higiene y protocolos para detener la propagación de enfermedades. La colaboración entre padres, maestros y autoridades es esencial para enfrentar estas situaciones de manera efectiva.

Beneficios de una adecuada prevención: Implementar y reforzar estas medidas preventivas no solo protege la salud de los niños, sino que también contribuye a:

• Reducir el ausentismo escolar: Al evitar que los niños se enfermen, se garantiza que la educación no se vea interrumpida, permitiendo un desarrollo académico estable y continuo.
• Generar conciencia en la comunidad: Las prácticas de higiene y prevención se vuelven hábitos que pueden extenderse a otros ámbitos de la vida, mejorando la calidad de vida de toda la familia.
• Fortalecer la colaboración entre instituciones: La coordinación entre el sector salud, el educativo y la comunidad es un modelo de integración que puede replicarse en otras áreas de la salud pública en El Salvador.

El llamado a la acción para los padres salvadoreños: Queridos padres y cuidadores, ¿están listos para tomar las riendas y proteger a sus hijos contra la enfermedad de manos, pies y boca? La prevención empieza en casa y con pequeños gestos cotidianos, como lavarse las manos y limpiar los juguetes, podemos crear un ambiente seguro para nuestros pequeños. ¿Sabías que cada pequeño esfuerzo cuenta para evitar la propagación del virus y que tu compromiso es esencial para construir un futuro más sano para El Salvador? No esperes a que un brote se convierta en una preocupación mayor. Infórmate, actúa y comparte esta información con otros padres. El bienestar de todos nuestros niños depende del cuidado y la atención que pongamos en cada detalle.

Conclusión: La enfermedad de manos, pies y boca representa un desafío, pero también una oportunidad para fortalecer la salud y la educación en higiene de nuestros niños. En El Salvador, donde la familia y la comunidad son pilares fundamentales, adoptar medidas preventivas efectivas es responsabilidad de todos. A través del lavado de manos, la desinfección de ambientes y el compromiso conjunto entre padres, escuelas y autoridades, podemos reducir significativamente el riesgo de contagio y garantizar que nuestros hijos disfruten de una infancia saludable y plena. Este mensaje no solo es un llamado a la acción, sino una invitación a la esperanza: juntos, podemos vencer al virus y demostrar que el compromiso y el amor son las mejores armas para proteger a nuestros niños y construir un país más fuerte y saludable. ¡Infórmate, actúa y cuida a tus hijos, porque el futuro de El Salvador comienza en casa!